El amor de amistad se coloca decididamente fuera del ambiente familiar y se aparta del color sexual. Según Santo Tomás, el amor de amistad es un amor perfecto. En este amor perfecto salgo totalmente fuera de mí terminando en mi amigo amado; yo amo a mi amigo por él mismo. Es un éxtasis de la intimidad (éxtasis no como algo sobrenatural, simplemente como ponerse fuera de sí), "la unión afectiva íntima entre el amante y el amado, que es el amor, supone la salida del amante de sí mismo y su persistencia afectiva en el amado, el éxtasis." En ese éxtasis yo me encuentro a mí mismo en el otro. Es el acto más encumbrado del amor, es la aprobación que hace mi intimidad de la intimidad del otro. Esta intimidad no es un espacio cerrado sino una relación que une por dentro a las personas.