Zambullirse

Una vez fuí con mi padre a la playa y mientras colocaba las toallas me preguntó:
- Hija, como está el agua?
Y yo, feliz por poder ayudar y colaborar en algo, me acerqué a la orilla y mojé un pie.
- Está fría papá.
Y mi padre se acercó a mi, me cogió en brazos y me tiró al agua.
- Hija, como está el agua ahora?
- Está buenísima papá!
- Hija mía, de ahora en adelante, para saber como son las cosas de la vida, tienes que zambullirte en ellas!